Según un estudio de la Universidad de Stanford y Tessian, el 88% de los incidentes de violación de datos se deben al factor humano, que es la principal vía de entrada de los ciberataques. Este dato está soportado también por IBM Security, que indica que el 95% de las violaciones cibernéticas se deben a errores humanos.
Este artículo profundiza en cómo se producen estos intentos de ciberataque y cómo fomentar una actitud atenta entre tus colaboradores.
Métodos comunes para realizar un ataque informático
Aquí tiene algunas razones y métodos habituales por los que las empresas se convierten en objetivos de ataques informáticos, basados en diversos estudios e informes de seguridad:
Phishing
Ésta es la técnica más utilizada y se aprovecha de los errores humanos. Los ataques de phishing incluyen correos electrónicos que parecen fuentes legítimas, pero que contienen enlaces o adjuntos maliciosos. Al hacer clic en estos enlaces o abrir los archivos, el malware se instala en el sistema del usuario.
Ingeniería social
Aparte del phishing, otras formas de ingeniería social pueden engañar a los colaboradores para que revelen información confidencial. Esto puede incluir pretextin, donde los atacantes crean una historia falsa para obtener información útil, o baiting, que promete al usuario algún tipo de incentivo a cambio de datos.
Malware y ransomware
Mediante descargas inadvertidas o vulnerabilidades en software desactualizado, el malware puede infiltrarse y comprometer sistemas enteros. El ransomware, un tipo de malware, bloquea el acceso a los archivos del sistema hasta que se paga un rescate.
Expotación de vulnerabilidades
Los fallos en el software que no han sido reparados son objetivos principales para los atacantes. Éstas pueden ser vulnerabilidades en sistemas operativos, aplicaciones de software o incluso en la infraestructura de red.
Acceso físico no autorizado
Aunque menos común, el acceso físico a los sistemas puede ser una vía para que los atacantes instalen dispositivos de keylogging o roben datos directamente de los sistemas.
Amenazas internas
En ocasiones, los ataques pueden originarse desde dentro de la organización por colaboradores descontentos o aquellos que han sido comprometidos.
Adoptar una actitud atenta
Para minimizar la vulnerabilidad de los empleados frente a los ataques informáticos, es esencial adoptar una actitud atenta y proactiva. Esto implica formación continua sobre las amenazas cibernéticas más recientes y las tácticas de ingeniería social que los atacantes podrían utilizar.
La concienciación y la formación regulares pueden ayudar a los colaboradores a reconocer señales de alerta como correos electrónicos de phishing, enlaces sospechosos y solicitudes de información no habituales. Establecer políticas claras sobre el uso seguro de dispositivos y redes, como la autenticación de dos factores y protocolos de acceso seguro, puede reforzar las defensas de la compañía.
Alentar a los colaboradores a compartir sus sospechas e incidentes, potencialmente dudosos, con el equipo de TI también puede ayudar a prevenir incidentes antes de que se conviertan en un problema mayor. Esta preparación no sólo mitigará los riesgos sino que también posicionarán a la empresa como una entidad responsable y consciente en el ámbito digital.